Como su propia palabra indica, se trata de una acción organizada, colectiva, que se realiza en un lugar público y durante un breve espacio de tiempo.
Su convocatoria suele realizarse a través de las redes sociales o los medios telemáticos. Estas comunicaciones suelen comenzar con un mensaje en el que una persona informa del día y la hora a la que va a realizarse la acción. Su contenido puede darse a conocer unos minutos antes en el mismo lugar escogido o en un punto cercano, si es que se ha citado a la gente en ese lugar para llegar en grupo. Aunque también se ha dado el caso en el que los participantes sabían de antemano el contenido y han tenido tiempo para prepararlo.
Sin embargo, algunos flashmob recogen matices sociales y políticos y se convierten en smartmobs es decir: “multitudes inteligentes, –según la acuñación del profesor Rheingold- que transmiten el mensaje, la denuncia de una manera perspicaz, con sutileza”.
Como animador sociocultural creo que la idea de los flashmob es algo novedoso y que claramente esta relacionado con nuestro ámbito. Cabe destacar que podemos realizar el flashmob como algo meramente relacionado con el ocio y tiempo libre, Pero destacar que a su vez puede ser una muy buena manera de poder hacer una crítica social mediante este movimiento y el baile. Relacionado con el vídeo anterior podemos observar como he dicho que se puede hacer una crítica social sin estar tan claro.
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